La Autenticación Biométrica o Biometría Informática es la aplicación de técnicas matemáticas y estadísticas sobre los rasgos físicos o de conducta de un individuo para su verificación de la identidad. Esto es lo que está detrás de los llamados sensores biométricos que conforman los sistemas de seguridad actuales en dispositivos como smartphones, tablets u ordenadores. En el mundo de la telefonía móvil, desde que Apple lo empezó a implementar en sus iPhone, el lector de huellas se ha convertido en el sistema biométrico de seguridad más utilizado.
Sudor humano
De hecho la tecnología ha propiciado más, como el escáner facial o el lector de iris, todos ellos diseñados para usar elementos tan personales como la huella de identidad, los rasgos del rostro o el iris del ojo del usuario. Y todos ellos requieren de un paso activo como poner el dedo en una zona o apuntarse con el sensor a la cara o al ojo. Pero incluso en los más avanzados se ha demostrado que el bloqueo por huella, iris u rostro pueden ser superados, algo que nunca pasaría con el considerado sistema biométrico definitivo: el sudor humano.
Un grupo de investigadores ha publicado un trabajo en el que se detalla cómo todo el mundo tiene un perfil de sudor único, específico para cada persona. Y cómo un dispositivo inteligente podría leer la mezcla de secreciones de su propietario a través de una muestra y desbloquear el terminal, igual que si se pusiera una huella o se utilizase el reconocimiento facial. De hecho uno de sus autores, Jan Halamek de la Universidad de Albania, reseña los beneficios que este método puede tener para personas “con ciertas discapacidades, porque no tendrían que recordar contraseñas o poner sus dedos en una posición particular para desbloquear sus teléfonos”.
Aminoácido ID
Según el investigador, “los aminoácidos que se encuentran en el sudor pueden ser usados para establecer un tipo de perfil aminoácido, capaz de identificar al usuario de un dispositivo móvil o de un wearable“. Y es que a diferencia del uso de las huellas, el sudor y lo que contiene es mucho más complicado de reproducir para quien desee acceder al móvil sin permiso de su dueño. Usando el sudor, la secuencia del mecanismo de desbloqueo del smartphone estará basada “en sistemas biológicos complejos que no pueden ser averiguados más que por el propio dueño del teléfono“.
¿Qué os parece la idea de sudar para desbloquear el móvil? Lo curioso de esto de los lectores biométricos es que se están usando incluso los latidos del corazón humano como sistema alternativo a la huella. ¿Llegaremos a ver un sensor de desbloqueo que nos pida una gota de nuestra propia sangre?
